sábado, 22 de enero de 2011

Capítulo VIII


La fiesta de disfraces que tanto había planeado Maddie junto a Nicole y Michael, comenzaba por la noche.
Al ser la casa de Madeleine, y la casa, ser bastante grande, o más bien dicho, siendo una mansión, se realizó allí.
La fiesta era de temática medieval, lo que la hacía, por lo menos para Maddie, “más interesante” pues la decoración era al estilo medieval y los invitados debían asistir vestidos de acuerdo a la época.


Cuando la fiesta dio comienzo, o estaba por comenzar…


- Miren quien viene aquí… ¿Es la princesita de este reino? – Dijo haciendo una reverencia.
- Oh, y que veo… ¿Es el príncipe del reino vecino? – Ambos rieron.
- Hola Maddie – Dijo dándole un beso en la mejilla.
- Hola Mike, ¿Cómo esta mi príncipe? – Sonrió.
- Bien, ¿y tu?
- Bien, algo ansiosa, quiero que esto resulte y resulte bien – Dijo abrasando a Michael.
- Princesita de mis sueños, ¿ha llegado alguien más, Nicole, Selena o alguien más? – Dijo besando su frente.
- Mmmm…Precisamente Nicole viene ahí. Oh! Y viene con alguien, ¿quién será? – Sonrió maliciosamente.
- Huy! Madeleine Strong, que son esos abrazos con Michael y tantos cariñitos – Dijo riendo.
- ¡Cállate! y deja de insinuar cosas y mejor dime quien es el caballero que traes contigo – Dijo guiñándole un ojo.
- Oh! Un amigo.



Los comentarios de Nicole habían logrado sonrojar un poco a Michael y a la vez lo puso algo incómodo. Pero trataba de hacer como que no los había oído.




Luego de unos minutos más, la gran mayoría de los invitados había llegado. La fiesta daba comienzo con un baile de salón.


- Soy mala para esto – Dijo Maddie Mirando sus pies mientras bailaba con Michael.
- No lo creo, solo déjate llevar por la música – Rió – Confía en mí.


Ambos bailaban abrasados el uno al otro. Madeleine con sus ojos cerrados y Michael con una sonrisa, como siempre.







Luego de transcurridas unas 2 horas aproximadamente, Madeleine hablo para los invitados.
La fiesta continuo, pero algo, algo especial, cerraría con broche de oro.









Se escucho un estruendo.









El vidrio estaba roto.








Una bala había roto el vidrio. Un cuerpo yacía ensangrentado en la fina alfombra del salón. Era un caos. Las personas corrían de un lado a otro, gritaban aterradas. No sabían quien sería el siguiente.
Podría ser Madeleine, Michael o tal vez Nicole, podría ser yo, o podrías ser tú, nada se sabía.
De pronto un silencio incómodo, y terrorífico invadió el lugar.


- Mike, tengo miedo, vámonos de aquí – Dijo Madeleine con sus ojos cristalizados.
- Tranquila – La abraso – Todo estará bien.
- ¿Seguro?
- Si, estoy seguro. Pero por seguridad… Ve arriba y empaca una maleta con tus pertenencias y yo iré por Blue y Charlie.
- ¿Para que? – Preguntó desentendida.
- Nos vamos a mi casa, para mayor seguridad.




Eso hicieron. Rosa y George fueron también con ellos y la casa queda un poco abandonada por unos días, mientras la policía se encargaba del asesinato. Maddie se mantenía algo escondida de la Policía, por miedo más que nada, por lo que George se encarga de los trámites y ese tipo de cosas.


Habían transcurrido 4 meses y medio desde que Madeleine vivía con Michael. La investigación de la Policía se había alargado muchísimo, ya que decían encontrar pruebas, hacer estudios, investigaciones, etc.


- ¿Mike?
- Si, corazón – Sonrió tiernamente.
- ¿Dónde esta Blue?
- En mi cama, durmiendo, o por lo menos así la deje cuando me fui de la habitación.
- Ok, y más te vale eh! – Dijo con mirada amenazadora y cruzándose de brazos.
- Oh! Con esa miradita, no podré mentirte – Dijo abrazándola para luego tomarla en brazos.
- ¡Hey! A donde me llevas, ¿Qué te pasa? ¡Bájame! – Dijo dándole un leve golpe con la palma de su mano en la cabeza de Michael.
- No, no te bajaré – Sonrió victorioso.
- ¡ B A J A M E !
- Deja de gritar Madeleine Strong – Dijo botándola en la cama.
- Oh no! Te conozco Michael, cosquillas no! – Dijo aun con sus manos en el cuello del joven – No te soltare, por que se que mi vida corre peligro.

Sus rostros se rozaban. Las palabras ya no salían de sus labios. Sus miradas chocaban. Sus respiraciones se volvían una sola. Las manos de Michael estaban en la cintura de la joven y las de Madeleine en el cuello de Michael. Se iban acercando. Se iban….haciendo uno.

1 comentario:

  1. ¡Hermanitaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! ¿Como estas? Deseo que te encuentres muy bien. A penas lei que habias subido un nuevo capitulo, sin duda me pase a leerlo. ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHH!
    ¡¡¡QUE CAPITULOOOOO!!! Me dejaste con toda la intriga del mundo, Jajaja. ¡Precioso el capitulo! Aunque no me gusto eso del asesinato, pero gracias a eso Maddie vive con Mike, y eso es super lindo. ¡Gracias por estar siempre!
    ¡¡¡TE QUIERO CON TODO MI CORAZON HASTA EL INFINITO Y MAS ALLA!!! ♥
    ¡CONTAS CONMIGO SIEMPRE! Que tengas un lindo finde y lo disfrutes. Besote enorme.
    Con cariño, tu hermanita...

    Yam! ♥

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